Si hay un misterio, si hay una fiesta religiosa que todo los cristianos sabe de que se trata es la Navidad. Es muy difícil, que alguien no sepa que en Navidad celebramos el nacimiento de Jesús, el Hijo de Dios que se hace hombre. De hecho hace ya dos mil años, que generación tras generación, los cristianos de todas las épocas vienen pronunciado el nombre de Belén con profunda emoción y con un corazón lleno de gozo y agradecido.
Hoy nosotros también queremos peregrinar con el corazón hacia Belén. De hecho hace más de 2000 años atrás el nacimiento de Jesús fue una nueva oportunidad, fue la oportunidad con mayúsculas que Dios le dio al pueblo elegido para empezar algo nuevo en su historia. Para nosotros esta navidad tiene que ser también una oportunidad que Jesús nos regala para que nazca algo nuevo en nuestra vida, en nuestra relación con Dios, en nuestra relación con los demás, en mi familia, en el país.
Hoy nosotros también tenemos que animarnos a contemplar el pesebre, porque en Él vamos a descubrir lo que Dios siente por nosotros, nos vamos a llenar de alegría y confianza, sin temor a abandonarnos en los brazos misericordiosos de Dios. Sin miedo a comenzar de nuevo, aunque ya lo hayamos intentado un millón de veces. Dios nos regala en este día la gracia para que lo intentemos una vez más.
Que una vez más nos propongamos crecer en la oración. Que una vez más me anime a acercarme a aquella persona a la que hace tiempo que le niego el saludo, o simplemente la ignoro. Una vez más estamos llamados a recibir la mano extendida de un hermano que desea colaborar a la vida de la comunidad en estas fiestas navideñas, Una vez más estamos llamados a recuperar la alegría de ser cristianos, a recuperar la esperanza que nos motiva a seguir en la vida. Una vez más estamos llamados a limpiar de nuestros corazones todos los ideales que una vez nos propusimos realizar y que hemos dejado de lado por algún motivo.
Muchas personas que no creen, e incluso algunas veces nosotros mismos tenemos miedo de empezar de nuevo. Tenemos miedo de Dios, tenemos miedo de los cambios que nos puede pedir. Y por eso aunque todos sepamos que significa la Navidad, no todos son los que le hacen lugar al niño para que nazca. No siempre le hacemos lugar a Dios en nuestra vida, o al menos el lugar que merece.
“No temas”- Le dijo el ángel a María cuando le anunció que iba a ser la Madre de Dios-. “No temas -le dijo a José- y recibe a María como esposa porque lo que ha sido engendrado en Ella proviene del Espíritu santo”. “No teman -le dijo a los pastores- porque ha nacido el salvador. ¡Qué bien que pueden venir estas palabras hoy en día! ¡Qué bien le pueden venir al país! ¡Qué bien nos pueden venir a cada uno de nosotros en más de una situación! “No temas porque Dios está contigo” No temamos porque Dios está con nosotros. Lo que tenemos que hacer es fiarnos con un corazón humilde y lleno de fe para descubrir su presencia cada vez más en nuestra convivencia.
¡Feliz Navidad!
Hola Padre,
ResponderEliminarEstuve a la Misa de Gallo en mi parroquia con mi madre, esperaba algo más grandioso, pero no. Mi madre y muchos viejos y viejas, Así de claro es hoy la religión católica: vieja y poco significante a la hora de manifestar sus fiestas, triste con prohibiciones. Y más si es tu foto en el perfil, dudo que tu seas tan joven. La Navidad católica es poco atractiva y potente para divertirse y disfrutar.
Anónimo dice que salió decepcionado de la Misa del gallo por lo que vió de improvisación y una comunidad avejentada. La primera afirmación pase, no siempre salen las cosas como se programan,fallaron algunos niños que se habían afrecido para llenar el Portal de Belén pero este fallo no debe achacarse al párroco sino a los feligreses que muchos no damos la talla de nuestra fe
ResponderEliminarEl segundo apartado la gente mayor pues hombre no sé que decirte yo contabilicé bastantes personas jóvenes incluso un nutrido grupo de niños que dado el horario nocturno y la inclemencia del tiempo debe valorarse muy`positivamente
Otra cosa es las Misas dominicales, si eres asiduo asistente habrás observado que predominan las personas mayores pero aquí había que tocar muchas teclas que descifren la clave de este fenómeno absentista de la juventud; dudo que unas celebraciones más folcloricas llenarian la Iglesia, ya se hace en la Misa de las 20h y no hay respuesta juvenil.El problema es de mayor calado y no creo que lo resuelva unas cuantas guitarras
Las prohibiciones de la Iglesia si te has detenido a examinarles con detenimiento no difieren apenas de las que marca el derecho natural. Otro factor que se elude con frecuencia es la arbitrariedad de la Iglesia a la hora de legislar cuando en realidad no hace otra cosa que recordar lo ordenado por el único Legislador Jesucristo y que los cristianos acojemos en la fe; posiblemente el problema que nos aqueja es la falta de FE
Laso no sé de qué hablas. Improvisación y niños. No vi ningunos, solo un viejo tocando al órgano y el viejo párroco con una voz poco audible. La mentirá de la Iglesia y sus prohibiciones es patente. Laso parece uno ser uno de estos curas que echan la culpa a los demás sin mirar sus insolentes culpas.
ResponderEliminarAnónimo. . .me arrastras a la réplica consciente de que no hay peor sordo que "quien no quiere oir" que tal vez seamos ambos desde nuestras irrebatibles trincheras
ResponderEliminarPrimero: estamos hablando de escenarios distintos con protagonistas diferentes--ya podias haber especificado algo más sobre el lugar pues no se puede juzgar el "todo" por la parte"
Segundo: te equivocas si piensas que por la defensa que hago a la doctrina eclesial soy un cura insolente de los que culpabilizan a troche-moche. . . .soy un vulgar cristiano de a pie padre de dos hermosas criaturas, muy orgulloso de la fe que he recibido de la Iglesia a través de un párroco de un villorrio de alta montaña. sin mucha instrucción teológica ni dado a controversias estériles ni repartiendo anatemas sino empeñado en vivir el evangelio en sus puras esencias, claro ejemplo legado a cuantos tuvimos la dicha de conocerlo. Eso sí, quiero decirte una cosa, me he movido mucho entre sacristías, he conocido sacerdotes--curas para entendernos--del más variado ropaje con defectos incluidos, pues no serían humanos, pero con un denominador común: muy enamorados de Cristo y de su evangelio que divulgan con la palabra y ejemplo de vida sin las cortapisas que las corrientes de moda quisieran imponerles lo que conlleva las inevitables críticas de los progres de turno. Puede que tambien estemos polemizando desde ópticas diferentes, de quien enjuicia la Iglesia con visiónn interna o desde el exterior con los consiguientes ditirambos por no pleglarse a las corrientes en uso
¿Y SI LA REALIDAD ES OTRA….?
ResponderEliminarHermano Anónimo, te veo preocupado por lo viejo y lo vistoso.
Mira, En la primera Navidad parecía que el más importante era César Augusto, y que José y María eran dos personas insignificantes. Esa apariencia continúa, pero no es más que una apariencia. La realidad es muy diferente, como lo fue aquella vez.
Jesús estaba escondido en María que era la más débil. Dios se hizo presente entre los hombres como un niño recién nacido, y aparentemente era el más débil. Hoy también sigue presente el Señor entre nosotros, sobre todo en los que son más desprotegidos, en los que no tienen fuerza (nuestros ancianos). Él se ha hecho uno con todos los seres humanos. Está especialmente unido con todos los cristianos, pero también está unido con cualquier hombre y mujeres, sobre todo con los que sufren, con los que como Él son personas, son débiles, son pobres y perseguidos.
Como los pastores, tratemos de encontrar a Jesús en esta Navidad: lo encontraremos donde hay un Niño recién nacido, envuelto en pañales y acostado en un pesebre. Dicho de otra forma, lo encontraremos donde se encuentra la debilidad y la pobreza. No lo busquemos donde hay arrogancia y prepotencia porque allí no lo vamos a encontrar. Dicho esto si tienes tiempo y vives en España, mira este video que parece menos pesimista según este sector de la iglesia.
(http://www.rtve.es/alacarta/videos/ultimas-preguntas/ultimas-preguntas-perro-verde-entre-jovenes-del-papa/1269998/ )
Gracias Laso por tu segunda reacción, te pasaste un poco en la primera. Y tú también Anónimo. Pero creo que con eso nos intercambiamos opiniones sobre temas importantes, y vale la pena. Y ante ti Yves me quito el sombrero porque “La verdadera elocuencia consiste en no decir más de lo que es preciso.”
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